VICTORIOSOS EN CRISTO

SERMON: VICTORIOSOS EN CRISTO

Texto base: 1 Corintios 15:57 Romanos 8>37

“Pero gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.”

Introducción

Vivimos en un mundo lleno de desafíos, luchas y momentos difíciles. Muchas veces nos sentimos derrotados, cansados y sin fuerzas para seguir adelante. Sin embargo, como hijos de Dios, no estamos llamados a vivir en derrota, sino en victoria. 

La victoria no depende de nuestras fuerzas, sino de lo que Cristo ha hecho por nosotros. 

Hoy veremos cómo podemos vivir como verdaderos victoriosos en Cristo.

1. Nuestra victoria proviene de Dios

“No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos.” – Zacarías 4:6

La victoria no depende de nuestras capacidades humanas. A menudo intentamos pelear nuestras batallas con nuestras fuerzas y terminamos agotados. 

Pero Dios nos recuerda que la victoria proviene de Él. Debemos aprender a confiar en su poder y dirección.

Ejemplo bíblico: David y Goliat (1 Samuel 17)

David no venció a Goliat con armas sofisticadas, sino con la confianza en Dios. Él sabía que la victoria estaba en las manos del Señor. De la misma manera, cuando enfrentamos gigantes en nuestra vida, debemos recordar que nuestra victoria viene de Dios.

2. Jesús nos ha dado la victoria en la cruz

“En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.” – Juan 16:33

La mayor batalla de la humanidad fue contra el pecado y la muerte, pero Jesús venció en la cruz. A través de su sacrificio, nos ha dado la victoria sobre el pecado, la culpa y la condenación.

Ejemplo bíblico: La resurrección de Jesús

Cuando Jesús resucitó, venció la muerte y el poder del enemigo. Esto nos asegura que, sin importar lo que enfrentemos, tenemos la victoria asegurada en Él.

3. Caminamos en victoria por la fe

“Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe.” – 1 Juan 5:4

La victoria en Cristo no siempre significa ausencia de problemas, sino la certeza de que, a pesar de ellos, Dios nos sostiene. La fe es clave para vivir una vida victoriosa. Cuando confiamos en Dios, nos levantamos por encima de las circunstancias.

Ejemplo bíblico: Pedro caminando sobre el agua (Mateo 14:28-31)

Mientras Pedro mantuvo su mirada en Jesús, pudo caminar sobre las aguas. Pero cuando miró el viento y las olas, comenzó a hundirse. Nuestra fe debe estar puesta en Cristo y no en las circunstancias.

4. Vivimos en victoria mediante la obediencia a Dios

“Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.” – Santiago 4:7

No podemos vivir en victoria si seguimos aferrados al pecado o la desobediencia. La obediencia a Dios nos fortalece y nos da autoridad espiritual.

Ejemplo bíblico: Josué y la conquista de Jericó (Josué 6)

Josué y el pueblo de Israel obedecieron las instrucciones de Dios, aunque parecían ilógicas (rodear la ciudad en silencio durante seis días y gritar el séptimo). Por su obediencia, Dios derribó los muros y les dio la victoria.

Conclusión: Somos más que vencedores

“Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.” – Romanos 8:37

Nuestra victoria no está en nuestra fuerza, sino en Cristo. Él ya ha vencido, y nosotros podemos vivir como vencedores cuando confiamos en Él, caminamos en fe y obedecemos su palabra.

Hoy es el día para dejar de vivir en derrota y empezar a caminar en la victoria que Dios nos ha dado. ¡Somos victoriosos en Cristo!

Llamado final

Si sientes que has estado viviendo en derrota, es momento de entregarle tus batallas a Dios. Ora, renueva tu fe en Jesús y empieza a caminar como el vencedor que Él te ha llamado a ser. ¡La victoria es tuya en Cristo!

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